Revista de Investigación en Ciencias de la Educación
Vol. 3, No 5, enero - junio 2025, 137-151
ISBN: 3073-1461
https://revistasfiecyt.com/index.php/riced
137
Estrategia pedagógica para la enseñanza de las asignaturas técnicas a nivel
de bachillerato
Pedagogical Strategy for Teaching Technical Subjects at High School
Juan Carlos Tuquerres Guayta1
Fanny Piedad Pachacama Chiguano2
Jeny Estefania Meza Espinoza3
Doris Belén Alulema Suárez4
1,4Unidad Educativa Mitad del Mundo, Ecuador.
2Institución Educativa Fiscal Quito, Ecuador.
3Colegio Humanístico Quito, Ecuador.
1Autor de correspondencia: jt03051975@gmail.com
Datos del artículo:
Recibido: agosto 12, 2024
Revisado: octubre 17, 2024
Aceptado: noviembre 15, 2024
Publicación: enero 1, 2025
Palabras clave: educación
técnica, disciplinas técnicas,
bachillerato, formación
integral.
Keywords:
technical education, technical
subjects, high school,
comprehensive training.
DOI:
https://doi.org/10.53877/riced
1.1-68
Este artículo está bajo la licencia
Resumen
Este trabajo se desarrolló con la finalidad de diseñar la estrategia pedagógica
para la enseñanza de las asignaturas técnicas a nivel de bachillerato. El estudio
es de enfoque cualitativo, se sustentó en una amplia revisión bibliográfica y
documental, así como también, en la sistematización de objetivos, acciones
estratégicas, actividades y un sistema de evaluación acorde a las referidas
disciplinas. La información recogida fue analizada y sistematizada con el
software de análisis de datos cualitativos Atlas ti. En los resultados se
presenta una estrategia pedagógica debidamente estructurada de acuerdo con
la finalidad, ya referida. La validez de la estrategia se realizó mediante criterio
de cinco especialistas, lo cual ratifica que, la estrategia presenta una estructura
sólida, y que está configurada por acciones estratégicas, actividades y un
sistema de evaluación pertinentes de acuerdo con las necesidades educativas
actuales en la educación técnica. De ahí, se concluye que, la estrategia
pedagógica para la enseñanza de las asignaturas cnicas a nivel de
bachillerato, es adecuada para su implementación.
Abstract
This work was conducted with the purpose of designing a pedagogical
strategy for teaching technical subjects at high school. This research adopts a
qualitative approach, grounded in an extensive bibliographic and
documentary review, and in the systematization of objectives, strategic
actions, activities, and an evaluation system aligned with the specified
disciplines. The collected information was analyzed and systematized using
the qualitative data analysis software Atlas ti. The results present a well-
structured pedagogical strategy aligned with the objective. Five specialists
assessed the validity of the strategy, confirming that it presents a solid
structure composed of strategic actions, activities, and an evaluation system
aligned with the current educational needs in technical education. In
conclusion, the pedagogical strategy for teaching technical subjects at high
school is suitable for implementation.
Juan Tuquerres / Fanny Pachacama / Jeny Meza / Doris Alulema
RICEd: Revista de Investigación en Ciencias de la Educación, Vol. 3, No 5, enero - junio 2025, 137-151 138
Forma sugerida de citar (APA):
Tuquerres-Guayta, J. C., Pachacama-Chiguano, F. P., Meza-Espinoza, J. E. y Alulema-Suárez, D. B. (2025).
Estrategia pedagógica para la enseñanza de las asignaturas técnicas a nivel de bachillerato. RICEd: Revista de
Investigación en Ciencias de la Educación. 3(5), 137-151. https://doi.org/10.53877/riced1.1-68.
INTRODUCCIÓN
El aprendizaje del ser humano ha sido objeto de permanentes estudios a lo largo de la historia.
Si bien, se han comprendido diversos aspectos sobre modos de adquirir, procesar,
comprender y aplicar cierta información como evidencia de aprendizaje, no es menos cierto
que, hasta ahora no se tienen suficientes certezas respecto de los procesos internos que el
cerebro realiza para aprender. Asimismo, se sabe que el aprendizaje está mediado por
diversos factores internos y externos, sin embargo, dada la naturaleza diversa de cada sujeto,
las afectaciones o influencias de estos serán también completamente diversas en cada sujeto.
Asumimos que aprender, es un proceso complejo que se realiza de maneras
particulares en cada ser humano, dado que, son las cualidades y capacidades, la cultura
precedente y las influencias de diversos factores, los que actúan como mediadores para su
desarrollo. Si bien, pueden existir algunas regularidades en los modos o maneras de aprender,
entre distintos sujetos, no es menos cierto que, la regularidad más frecuente será la diferencia.
Lo cual, impone verdaderos retos a la escuela y particularmente al profesorado, dado que,
entre sus principales responsabilidades está la posibilidad de promover la construcción de
aprendizajes, como vía hacia la formación integral.
En ese sentido y asumiendo que la formación integral del ser humano involucra el
desarrollo de habilidades cognitivas, sociales y motrices para facilitar su interacción en
contextos diversos y cambiantes, así como, la solución a problemas reales; la implementación
de recursos pedagógicos, metodológicos y didácticos, entre otros, emerge como una necesidad
imperante, más todavía, considerando los avances tecnológicos dirigidos al mejoramiento de
la educación en los actuales momentos históricos.
Téngase en cuenta que, no es suficiente con disponer de recursos tecnológicos o de
otra naturaleza en las aulas, para que los estudiantes aprendan; se requiere establecer rutas
probadas de aprendizaje y estas, se expresan a través de metodologías, estrategias y técnicas,
entre otras posibilidades. Lo cual, otorga sentido y relevancia a este trabajo investigativo.
Esta investigación de carácter propositivo se realidesde el enfoque cualitativo
descriptivo. El diseño de la estrategia para la enseñanza de las asignaturas técnicas a nivel de
bachillerato, se sustenta en información recogida de diversas fuentes de alto impacto, así
como, de las necesidades específicas y de las áreas técnicas como: mecánica industrial,
mecánica automotriz, servicios hoteleros, meca trónica, gastronomía, entre otras, que requiere
el desarrollo de habilidades cognitivas, sociales y psicomotrices en el desempeño de los
egresados.
La sistematización de las acciones estratégicas se llevó a cabo con el uso del software
para el análisis de datos cualitativos Atlas ti., considerando categorías y subcategorías
pertinentes a las asignaturas técnicas, así como, la diversidad de posibilidades de aprendizaje
del estudiantado.
La estrategia luego de ser diseñada, fue sometida a un estudio de validez por 5
especialistas, profesores de asignaturas técnicas a nivel de bachillerato. Estos profesionales,
analizaron la propuesta inicial y sugirieron los cambios o mejoras pertinentes para su
fortalecimiento antes de la publicación de este trabajo. Cabe señalar que, los especialistas,
fueron escogidos siguiendo técnicamente, criterios como: experiencia docente (mínimo 5
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años), especialidad en su formación de grado (áreas técnicas específicas), grado académico
(magíster o doctor), participación como autor o coautor en publicaciones (mínimo 3).
El principal objetivo de este trabajo fue: diseñar una estrategia pedagógica para la
enseñanza de las asignaturas técnicas a nivel de bachillerato, misma que sería implementada
de manera progresiva, y mejorada en función de sus resultados y las cambiantes exigencias
del mundo laboral. Cabe señalar que, el profesorado antes de implementar esta estrategia,
debe participar en procesos de socialización, para elevar su empoderamiento y conocimiento
suficiente para una efectiva implementación en contexto.
DESARROLLO
Estrategia Pedagógica
Una estrategia pedagógica es un conjunto organizado y sistemático de acciones, métodos y
recursos que se emplean para facilitar el proceso de enseñanza aprendizaje (Castillo, 2015).
Este tipo de estrategia, para ser efectivas y eficientes en cuanto tiene que ver con el
aprendizaje, están constituidas por distintos componentes, a saber:
Fundamento teórico en torno al aprendizaje y el desarrollo cognitivo; objetivos
medibles que permitan valorar su eficiencia; secuencia clara de los procesos o actividades
específicas para promover el aprendizaje, la retención del conocimiento y el desarrollo de
habilidades. Es decir, la estrategia pedagógica está debidamente planificada.
Asimismo, una estrategia pedagógica es adaptable a diferentes circunstancias y
contextos educativos; tiene una base empírica que demuestra desde la investigación educativa
y la psicología cognitiva la evidencia científica suficiente respecto de su efectividad, dado que
se trata que un producto, probado y válido.
Cabe señalar que toda estrategia pedagógica tiene un sistema de evaluación integral,
de tal manera que se realice un seguimiento sobre la marcha para la implementación oportuna
de las mejoras necesarias, en función de los objetivos establecidos.
Recomendaciones para la Implementación de la Estrategia Pedagógica
- Dado que, la estrategia pedagógica para la enseñanza de las asignaturas técnicas a nivel de
bachillerato es adaptable, el profesorado está en la libertad de realizar los ajustes que
considere necesario para adecuarla a las reales necesidades e intereses del contexto educativo
en el cual se pretende aplicar.
- La flexibilidad de la estrategia es una característica fundamental, dado que, permite
adaptarla a diferentes niveles educativos, e incluso a otras disciplinas, realizando los ajustes
necesarios. Por tanto, la iniciativa y la creatividad del profesorado juega un papel esencial en
estos procesos.
- La integración de diferentes recursos tecnológicos apoya y potencia, tanto la implementación
de la estrategia, así como también el alcance de los resultados previamente establecidos. Por
tanto, la tecnología debe ser altamente aprovechada con miras a una adecuada y eficiente
implementación de la estrategia.
- La gamificación como enfoque educativo, emerge como un componente de importancia en
el momento de implementar la estrategia en contexto educativos reales. Téngase en cuenta
que, facilita la integración implicación de los estudiantes en su quehacer educativo (Arguedas
Negrini, 2016). Lo cual resulta importante en procesos educativos activos y participativos.
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Diseño de la estrategia pedagógica
Desde los fundamentos anteriores se platea que la estrategia pedagógica, es un conjunto
organizado y sistemático de actividades y otras posibilidades que, respondiendo a objetivos
de aprendizaje previamente establecidos, se implementa para potenciar el desarrollo de
conocimientos, experiencias y valores en el contexto educativo (Castillo, 2015; Membrive et
al., 2022). En tal sentido, el conocimiento sobre los modos de ser y pensar de cada uno de los
estudiantes, juega un papel fundamental al momento de plantear una estrategia pedagógica.
En concordancia con lo anterior, a continuación, se explica la estructura de la
Estrategia Pedagógica para la Enseñanza de la Asignaturas Técnicas a nivel de Bachillerato
como se ilustra en la Figura 1. Cabe señalar que, debido a las características puede ser
adaptada a otros niveles educativos, así como también, a diferentes asignaturas de la malla
curricular.
Figura 1
Estrategia pedagógica para la enseñanza de las asignaturas técnicas a nivel de bachillerato
Nota. La Figura muestra el diseño de la estrategia pedagógica para la enseñanza de las asignaturas
técnicas a nivel de bachillerato. Sistematiza el objetivo general, los objetivos específicos, las acciones
estratégicas y las actividades, así como el sistema de evaluación integral para que sea efectiva en
términos de aprendizaje y desarrollo integral del ser humano.
La estrategia tiene como principal objetivo, desarrollar conocimientos, experiencias y valores
sobre las asignaturas técnicas a nivel de bachillerato. En este sentido, téngase en cuenta que la
estrategia se orienta por los componentes esenciales de la formación integral del ser humano
(cognitivo, afectivo y psicomotor). Es decir, los bachilleres técnicos son seres humanos que
desarrollan habilidades de orden disciplinar dentro del área técnica correspondiente, sin
embargo, su formación se consolida con conocimientos de orden social, para una adecuada
interacción en distintos contextos, y psicomotrices, para resolver situaciones o problemas
específicos reales.
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Se ha demostrado que, el saber hacer las cosas en la práctica, resulta insuficiente en términos
de aprendizaje, así como, en la formación integral del ser humano. Resulta de fundamental
importancia conocer los fundamentos teóricos existentes en concepciones, características,
ventajas, desventajas y más posibilidades que se encuentran en el conocimiento sistematizado,
así como, manifestar o evidenciar modos de ser, sentir, pensar y actuar de acuerdo con las
necesidades contextuales. Téngase en cuenta que, el ser humano como un ser social, establece
relaciones con los demás y estas, deben desarrollarse en términos de afectividad, respeto,
colaboración, empatía y más condiciones propias de una sociedad favorecedora del
crecimiento personal y social (Flórez Rodríguez & Sánchez Aragón, 2022).
Tomando en cuenta que, el objetivo general constituye la meta más amplia de esta
estrategia pedagógica en términos de aprendizaje de las asignaturas o disciplinas técnicas, en
las mismas que se requieren conocimientos teóricos, socio-emocionales y psicomotrices; se
plantean a continuación, los 4 objetivos específicos (OE) que permiten la planificación e
implementación de actividades educativas concretas.
OE1: Promover el desarrollo autónomo de conocimientos.
OE2: Desarrollar valores y valoraciones en torno a las disciplinas técnicas.
OE3: Incorporar y desarrollar habilidades motrices.
OE4: Implementar los conocimientos teóricos y prácticos en el desempeño del rol
profesional.
Con los objetivos específicos planteados se pretende hacer trascender el aprendizaje,
desde un acercamiento muy básico a los conocimientos teóricos existentes, hacia su
implementación consciente y solvente en una práctica laboral real y contextualizada. Es decir,
se trata de un proceso progresivo que va dotando a los estudiantes de conocimientos y
experiencias indispensables para que, en su debido momento, asuman un rol laboral
específico con solvencia profesional, en el área técnica de su formación.
Como se puede notar, en los objetivos específicos planteados, no solamente se incluyen
conocimientos de orden disciplinar y práctico, sino que además, se apresta especial atención
al desarrollo de habilidades sociales, ya que, estas juega un rol fundamental en la formación
integral de un ser humano capaz de interactuar con eficacia en contextos cambiantes e
inconmensurablemente exigentes.
Asimismo, la estrategia más allá del desarrollo de habilidades prácticas para la
integración de los egresados del bachillerato al mundo laboral, tiene en cuenta las habilidades
necesarias para que continúen en estudios superiores y eleven sus posibilidades de éxito en
lo personal y social. Es decir, no se está pensando únicamente en el éxito educativo a corto
plazo en el bachillerato, sino, más bien en el éxito del ser humano a lo largo de la vida, a través
de su formación integral.
Asumiendo que las acciones son conjuntos de actividades específicas, en esta primera
implementación de la estrategia se plantea una Acción por cada objetivo específico. Cabe
señalar que, lo esencial de la estrategia es la estructura y lógica, que más allá de las actividades
dan sentido y significado a estas. En este sentido, el profesorado teniendo en cuenta las
circunstancias en las cuales pretende implementar la estrategia, podría plantear más acciones
y actividades en función de las necesidades e intereses de los estudiantes. A continuación, se
explican las acciones propuestas:
Acción 1: Exploración
Acción 2: Reflexión
Acción 3: Práctica
Acción 4: Aplicación
El conjunto de las acciones planteadas, tienen un profundo carácter pedagógico, de ahí
que trascienden por la Exploración, la Reflexión, la Práctica y la Aplicación (ERPA),
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respondiendo a enfoques educativos que en la actualidad son tendencia, como: la
personalización del aprendizaje, la clase inversa y el aprendizaje experiencial, que entre otros,
tratan de provocar la construcción de ambientes de aprendizaje agradables, acogedores y
potenciadores del desarrollo integral del ser humano, atendiendo de manera oportuna y
pertinente sus intereses y necesidades.
La Exploración, se constituye en un acercamiento intencional a la realidad objeto de
estudio. Teniendo en cuenta principios de la clase inversa, los profesores dan las orientaciones
necesarias a los estudiantes para que exploren de manera libre y autónoma en información
sobre los diferentes temas o contenidos curriculares que se están intentando aprender. Para
esto, pueden emplear recursos en abierto, materiales colocados en plataformas educativas,
recursos impresos, audios y videos, entre tantas otras posibilidades, para comprender las
concepciones, características, clasificaciones, ventajas, desventajas y demás aspectos que se
requieren conocer y lógicamente, aprender.
Esta exploración libre y autónoma realizada por los estudiantes, libera a los profesores
del rol tradicional de transmisor de información, lo cual, significa un importante avance, dado
que, el valioso tiempo de encuentro entre estudiantes y profesores, no se invierte en una tarea
sencilla y poco significativa como la referida. Téngase en cuenta que, en la actualidad la
información se encuentra en distintos medios y formatos, además son de fácil acceso.
En tal contexto, el estudiante en función de sus intereses y necesidades, así como de
las posibilidades en determinado momento realiza la exploración más adecuada en las
diferentes fuentes a su alcance. Esto incluye, explorar en internet, visita a bibliotecas, diálogo
entre compañeros o colegas de clases, diálogo con expertos, análisis en grupo y tantas otras
alternativas que, coadyuvan al aprendizaje autónomo. El trabajo autónomo es fundamental
en los procesos educativos, dado que, fortalece el desarrollo de conocimientos disciplinares,
así como también, de habilidades sociales (Gavilánez Villamarín et al., 2016).
En este proceso de exploración, van surgiendo innumerables inquietudes sobre los
aspectos o contenidos específicos, frente a lo cual, los estudiantes intentan encontrar
respuestas por solos, profundizando en sus exploraciones. Esta posibilidad, es altamente
enriquecedora en términos de aprendizaje, dado que reta al aprendiz en buscar nuevos
conocimientos. Desde un punto de vista psicológico, al ser el propio estudiante quien
encuentre respuestas a sus inquietudes, incrementa sus niveles de motivación y autoestima.
Asimismo, desde un punto de vista pedagógico, el estudiante ubica en la respuesta un
encuentro significativo e impactante que favorece a la memorización reflexiva en base a la
experiencia. Desde un punto de vista social, al compartir la experiencia con sus colegas de
clase, con algunos miembros de la familia, con los profesores e incluso, con otras personas,
sigue aprendiendo e influyendo en el aprendizaje de los demás (Crispín Bernardo et al., 2011).
De ahí que, el encuentro del estudiante con el conocimiento o simplemente con las
posibilidades que conllevan a este, surgen como hechos significativos a nivel individual y
colectivo; incluso como hechos memorables. Nótese que, mientras aprende autónomamente,
el estudiante está influyendo en el aprendizaje de los demás, incluso, de los profesores quienes
requieren seguir aprendiendo para ser pertinentes en el desempeño de su rol en un mundo
cambiante como el actual. Preguntar, responder, reflexionar y debatir, entre otras
posibilidades eminentemente socioeducativas, son medios indiscutibles para aprender de
manera activa.
En el referido proceso de exploración los estudiantes van encontrando respuestas
progresivamente a sus inquietudes, lo cual, también es motivador y alentador para seguir
avanzando con mayor enfoque. Este proceso, es particularmente importante en el aprendizaje,
dado que, origina nuevos intereses y motivaciones, sobre la base de los también, nuevos
aprendizajes y experiencias construidas.
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En el orden estratégico, mientras los estudiantes exploran y aprenden autónomamente,
registran sus dudas, inquietudes y preocupaciones, para plantearlas a los docentes durante la
clase. Así, la clase no es el espacio para transmitir información como sucedía en la escuela
tradicional, sino, para reflexionarla de manera profunda, así como también, para realizar
ejercicios y experimentaciones (Tünnermann Bernheim, 2011). Durante la clase, los profesores
responden las inquietudes de los estudiantes y amplían la información, lo cual, enriquece los
aprendizajes. Es decir, el profesorado está para atender aquellas cuestiones de fondo, lo que
el estudiantado no logró comprender autónomamente.
La Reflexión, implica pensar de manera profunda y crítica sobre un tema, experiencia
o situación, y conlleva a analizar, cuestionar y considerar diferentes perspectivas. La reflexión,
no implica pensar superficialmente; se trata de realizar de manera consciente la extracción de
la mejor información, identificando patrones y dando lugar a la comprensión holística y
compleja de la realidad. La reflexión, es fundamental para potenciar el crecimiento personal,
la toma de decisiones y la mejora continua en diversos contextos, como el aprendizaje, el
trabajo, las relaciones o la vida cotidiana. Es decir, se trata de un proceso que no queda
limitado a la escuela, sino que, trasciende a la vida. Esta posibilidad es determinante en los
procesos educativos, a tal punto que ha sido considerada como uno de los principales
componentes de la calidad de las instituciones educativas (Abreu et al., 2015). En ese contexto
se desarrolla distintos tipos de reflexiones, entre los cuales están:
- La reflexión del estudiante con respecto a sus propias experiencias de aprendizaje autónomo,
así como también, sobre sus emociones, pensamientos y acciones, resulta sumamente
importante. Se trata de una reflexión que tiene como principal finalidad el autoconocimiento,
con miras a la mejora continua del comportamiento (Membrive et al., 2022). En ese sentido los
estudiantes reflexionan sobre las experiencias vividas en los procesos exploratorios, así como
también, sobre los hallazgos, por tanto, siguen fortaleciendo sus conocimientos.
Téngase en cuenta que, la reflexión es a nivel del curso o paralelo, sin embargo, se
busca el desarrollo de profundos procesos de reflexión personal. Es decir, que se realiza en
función de la revisión de las propias acciones del sujeto, a partir de su exposición, así como
también, de la contrastación con experiencias de sus colegas de clase y del profesorado. En
estos procesos se busca desarrollar, diferentes tipos de reflexión, como se exponen en los
siguientes párrafos:
- La reflexión crítica, que conlleva al análisis de conceptos o ideas más abstractas, entre las
cuales estarían: los problemas sociales, filosóficos y éticos, entre otros (Chacón Corzo, 2006).
En esta reflexión se analizan diferentes puntos de vistas para arribar a conclusiones, sobre las
bases de las concordancias y divergencias alcanzadas. Dado que la reflexión crítica tiene un
carácter holístico, amplia las posibilidades de comprensión del problema, al tener en cuenta
todos los puntos de vista posibles. Es esta estrategia, la reflexión crítica, resulta altamente
eficiente cuando se realiza a nivel grupal.
- La reflexión acción, que implica un proceso de pensar en torno a una determinada actividad.
Esto permite implementar y ajustar las decisiones, corrigiendo las acciones sobre la marcha
para optimizar el alcance de los resultados establecidos (García Pérez et al., 2011). Este tipo de
reflexión a más posibilitar mayores niveles de comprensión sobre el objeto de estudio, permite
visibilizar aciertos y desaciertos en los procesos de reflexión que se están realizando en la
enseñanza - aprendizaje. Por tanto, aporta en la crítica y autocrítica, a la vez que, potencia la
mejora continua a nivel individual y colectivo, fomentando mayores posibilidades de
aprendizaje.
- La acción posterior a la reflexión, al realizarse luego de las acciones o la toma de decisiones,
es empleada para revisar lo que se ha hecho, en torno a lo que puede mejorarse, así como
también, sobre lo aprendido de las experiencias. Por tanto, coadyuva al desarrollo de
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habilidades prácticas relacionadas con la búsqueda, análisis e interpretación de la
información. Desde esa perspectiva, el estudiante eleva progresivamente su experticia para
aprender autónomamente (Solórzano-Mendoza, 2017).
La Práctica, es una de las mejores alternativas en un proceso de enseñanza
aprendizaje activo y participativo, tomando en cuenta que, se constituye en un mecanismo
para la consolidación del conocimiento adquirido. Se conoce que, los procesos neuronales se
refuerzan a través de la repetición y la aplicación constante de lo aprendido (Vélez-Miranda
et al., 2020). Nótese que, no se está hablando de una repetición mecánica o fragmentada, sino
de un proceso que analiza las diferentes situaciones de manera integral. Así, el aprendizaje no
se impone como algo superficial y efímero, sino, como un proceso cuyos resultados te duran
en el tiempo, conllevando a la solución de problemas reales de la vida cotidiana.
Según varios estudios, la práctica es fundamental en los procesos de corrección de los
errores, dado que, cuando repiten una tarea, los estudiantes pueden identificar áreas en las
que fallaron o elementos específicos en los cuales cometieron errores. No se trata de realizar
una práctica repetitiva, mecánica y fragmentada, sino más bien, de practicar conscientemente
aquellas acciones que requieren ser consolidadas y transformadas en aprendizaje. La práctica
permite mejorar los procesos, la precisión y con ello elevar el rendimiento en cualquier ámbito.
Téngase en cuenta también que, en las disciplinas técnicas, la práctica es una de las principales
alternativas para alcanzar ciertos niveles de dominio de habilidades y destrezas específicas.
Con suficiente práctica, diversas actividades pueden llegar a automatizarse. Por lo que
podrían desarrollarse sin pensar demasiado en los procesos más específicos involucrados. Se
trata de una posibilidad que reduce significativamente la carga cognitiva y permite al
aprendiz, concentrarse en aspectos más avanzados, e incluso, enfocarse en la resolución de
problemas o situaciones complejas. De ahí que, la práctica puede ser altamente aprovechada
en los procesos de enseñanza - aprendizaje como un mecanismo idóneo para la construcción
de conocimientos válidos y duraderos.
En las asignaturas o áreas técnicas, la práctica juega un papel fundamental, dado que,
generalmente los estudiantes requieren desarrollar habilidades específicas como:
cumplimiento de algoritmos y procedimientos, operación de equipos y máquinas, que, entre
otros, requieren de un elevado dominio. Por tanto, la práctica en el aprendizaje de contenidos
de carácter técnico concentra alta dedicación de tiempo y recursos, por tanto, no es posible
alcanzarla de manera ligera.
Entre otros beneficios importantes de la práctica se encuentra el desarrollo de la
confianza y la resiliencia. Es decir, a medida que el estudiante es más competente en una
determinada habilidad, su nivel de confianza se eleva para enfrentar situaciones similares. El
saber que es capaz de dominar una determinada tarea, refuerza la autoconfianza y motiva a
seguir aprendiendo. Asimismo, no puede dejarse de lado que, el alcance de una determinada
habilidad o la mejorara de una existente, puede constituirse en una tarea frustrante, pero, en
la práctica permanente se cultiva la resiliencia como un mecanismo esencial para
sobreponerse de situaciones complejas y continuar en función de objetivos (Rojas Valladares,
2018).
Debe considerarse también que los estudiantes para enfrentarse a las prácticas
preprofesionales, así como también, al futuro desempeño profesional, deben haber
desarrollado suficientes habilidades cognitivas, socio-afectivas y psicomotrices, lo cual, sin
práctica, resulta difícil. Por consiguiente, se sugiere que el desarrollo de las habilidades
alcanza su realización en la práctica, más allá de la memorización de conceptos o información,
que sin duda puede tener algunos aportes.
La Aplicación de conocimientos en el abordaje de situaciones o problemas
profesionales concretos, debe realizarse progresivamente (García Retana, 2011). Esta
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posibilidad, permite un crecimiento personal y profesional natural y altamente positivo. Es
decir, el estudiante va integrándose poco a poco a la realidad profesional concreta, sin
presiones ni temores, dado que, ha desarrollado habilidades para tales efectos. Así, el
cumplimiento de roles específicos se convierte en una experiencia de progresivo aprendizaje,
minimizando los potenciales riesgos.
Cabe señalar que la integración progresiva del aprendiz al cumplimiento de un rol
profesional, debe desarrollarse en un proceso gradual, en el cual, este va adquiriendo y
fortaleciendo las habilidades y experiencias para asumir responsabilidades dentro de un
campo determinado. Sin duda, se trata de un proceso que potencia el crecimiento personal y
profesional, de tal manera que, en un determinado momento el aprendiz asume el rol
autónomamente. Este proceso, al tiempo que motiva al estudiante a seguir aprendiendo,
genera experiencias positivas que perduran y coadyuvan en la identidad profesional.
En tales procesos, resulta de fundamental importancia considerar periodos de
observación, de participación activa y asunción gradual de roles y responsabilidades. Es decir,
se trata de un proceso progresivo que conlleva al sujeto a estar plenamente integrado a un
equipo de trabajo u organización, asumiendo profesionalmente un rol específico, en las
condiciones laborales más idóneas para beneficio personal, así como, organizacional. Debe
considerarse que el éxito de un profesional en un puesto de trabajo, es en cierta medida
determinante para el éxito de la organización o la empresa para la cual trabaja, los buenos
equipos, hacen de la organización o la empresa una oportunidad de desarrollo, pero,
impulsan el crecimientos sostenible y sustentable de la misma.
Actividades Estratégicas
Se plantea un conjunto de actividades estratégicas a desarrollarse en cada una de las acciones
estratégicas propuestas, sin decir con esto, que se trate de las únicas que pudieran llevarse a
cabo en la estrategia pedagógica para la enseñanza de las asignaturas técnicas a nivel de
bachillerato. Es importante considerar que, dependiendo de la asignatura o área técnica que
se pretende enseñar, el profesorado planteará las actividades más adecuadas e idóneas, en lo
cual, la edad, el nivel de desarrollo, la disponibilidad de recursos, entre otros, factores deben
considerarse también.
Asimismo, el nivel educativo del bachillerato (primero, segundo, tercero) se constituye
en un aspecto a considerarse para la implementación de la estrategia. Dicho de manera
general, la estrategia es abierta y flexible, por lo que, puede ser adaptada a las necesidades,
intereses y demás posibilidades del contexto en el cual se pretende implementar.
Acción Estratégica 1: Exploración (Exploración de información, Validación de la
información y Síntesis)
- La Exploración de información, de manera libre y autónoma en los diferentes medios
disponibles, llevan a cabo los estudiantes, luego de recibir orientaciones básicas de parte del
profesorado, con respecto a: medios accesibles, tipo de acceso, contenidos generales, entre
otros aspectos esenciales. Es decir, no es suficiente con que los docentes les comuniquen el
tema y los estudiantes lo indaguen arbitrariamente, se requiere de ciertas orientaciones para
que la búsqueda de información aporte en el desarrollo del conocimiento.
- La Validación de la información, se lleva a cabo en los procesos de consolidación del
conocimiento que se da en el proceso enseñanza aprendizaje en actividades in crónicas
virtuales o presenciales de estudiantes y docentes. Se trata de aprovechar el tiempo de
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encuentro entre estos dos actores, para consolidar los aprendizajes realizados autónomamente
e incluso dar lugar a otros aprendizajes.
- La Síntesis, que implica alcanzar acuerdos mínimos respecto de los aspectos esenciales del
objeto de estudio. Puede hacerse por escrito, en audios, videos, representaciones u otras
posibilidades a nivel individual o grupal. Si se trabaja individual o grupalmente, depende de
los tipos de contenido, las circunstancias específicas de aprendizaje, las características de los
grupos, las modalidades de estudio y la disponibilidad de recursos; entre otros.
Acción Estratégica 2: Reflexión (Exposición, Debate y Sistematización)
- La Exposición, que puede ser realizada por los estudiantes o por los docentes a manera de
demostración. Se trata de ubicar en el contexto del objeto de estudio, así como, del contexto al
que los aprendizajes se dirigen. La exposición debe ser lo suficientemente profunda, de tal
manera que conlleve a entrelazar lo que los estudiantes aprendieron autónomamente con lo
que se está abordando en esta. Este proceso, permite establecer un punto de partida para todos
los participantes en la clase presencial o sincrónica, según la modalidad de estudios. Es
importante señalar que este proceso se realiza en el encuentro entre estudiantes y docentes.
Así, estos últimos tendrá la oportunidad de realizar aclaraciones y reforzar los temas tratados,
de manera oportuna.
- El Debate, que permite reflexionar sobre los aprendizajes que los estudiantes han construido
autónomamente con el fin de continuar consolidando los conocimientos previamente
construidos. No se trata de ratificar lo aprendido, sino de hacer una revisión profunda en el
marco de la reflexión. Es decir, se ponen los conocimientos adquiridos a prueba en mesas de
trabajo, debates y reflexiones; revisando actualidad, validez, pertinencia, enfoques, posturas,
entre otras posibilidades que dan sentido y significado a los contenidos, a más de optimizar
su apropiación.
- La Sistematización, que puede realizarse de manera verbal o por escrito, debe ser siempre
compartida entre todos los participantes, dado que, se trata de resaltar y puntualizar los
aspectos más relevantes del objeto de estudio, como: las concepciones, características y demás
posibilidades esenciales. Resulta muy interesante desarrollar las sistematizaciones en
plenarias, de tal manera que la misma información esencial esté al alcance de todos. Esto no
implica aprender lo mismo y de la misma manera, se tiene claridad con respecto a la
diversidad del ser humano, pero, trata de no perder de vista los principales aspectos
esenciales, como principios, leyes, procesos, entre otros, determinan el futuro desempeño
profesional, donde los gustos, preferencias y demás posibilidades perceptivas, no son
suficientes, por tratarse de cuestiones eminentemente técnicas.
Acción Estratégica 3: Práctica (Demostración, Práctica guiada y Práctica autónoma)
- La Demostración, que será llevada a cabo por los profesores y progresivamente por los
estudiantes. Si bien, no es una regla que sean los profesores quienes demuestren la manera de
ejecutar una tarea específica, deberá evaluarse los riesgos y demás circunstancias de acuerdo
con el tipo de área, disciplina o asignatura técnica que se está estudiando. Es decir, si se trata
de actividades o tareas sencillas, pueden ser los estudiantes los encargados de la
demostración. Sin embargo, a pesar de estos, siempre habrá el respectivo acompañamiento
del profesorado. Demostrar implica ejecutar procesos organizativos, operativos y logísticos,
entre otros, de manera similar al desempeño del rol profesional.
- La Práctica guiada, se desarrolla a nivel áulico con el fin de promover el desarrollo
progresivo de las habilidades específicas básicas requeridas para el desempeño del rol
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profesional. Este proceso será progresivo, dado que, ciertas habilidades se constituyen en
bases esenciales para el desarrollo de otras. Asimismo, se partirá de actividades o tareas
sencillas y se trascenderá hacia más complejas en función de los niveles de desarrollo
evidenciados por los estudiantes. Al ser una práctica que va desde un acercamiento didáctico
hacia desempeños, lo más cercanos posibles a la realidad en el desempeño de un cierto rol
profesional; deberá tomarse todas las medidas necesarias para minimizar los riesgos. Téngase
en cuenta que, en las áreas o disciplinas técnicas, por lo general, se operan máquinas y equipos
que requieren normas y habilidades para su uso.
- La Práctica autónoma, que implica la ejecución de proyectos áulicos individuales y
colectivos, en función de la disponibilidad de equipos, máquinas y demás recursos destinados
para la enseñanza aprendizaje. Si bien, se trata de prácticas autónomas, no es menos cierto
que, la supervisión y el acompañamiento del profesorado debe estar presente en todo
momento y espacio. En esta práctica se realizan proyectos pequeños para compartirlos en
exposiciones a nivel de aula, curso e institución. Cabe señalar que, debe prestarse especial
atención a la iniciativa y la creatividad, puesto que, más allá de la formación de trabajadores
pasivos, se trata de potenciar el desarrollo de habilidades y destrezas directivas, organizativas
y creativas que conlleven a la innovación en el ámbito disciplinar correspondiente.
Acción Estratégica 4: Aplicación (Observación, Práctica de consolidación y Práctica laboral
inicial)
- La Observación en contextos laborales reales, se realiza con la finalidad de desarrollar una
amplia comprensión sobre las operaciones cotidianas de un determinado rol profesional en
contexto. En este proceso, se da lugar a la familiarización del estudiante con el ritmo de trabajo
y las expectativas del entorno laboral concreto. Asimismo, permite desarrollar y adecuar
ciertas habilidades sociales como: comunicación, manejo de estrés y comportamiento ético,
entre otras, que resultan determinantes en procesos como: atención al cliente,
comercialización, producción, transporte, etc.
En este acercamiento al campo laboral real, los estudiantes tienen la posibilidad de
asistir a la empresa y observar cómo los empleados se desempeñan en un rol laboral
específico. Se trata de una fase en la que no intervienen directamente en los procesos
productivos, pero, observan y obtienen información valiosa que les ayudará posteriormente
a desempeñarse con solvencia en las siguientes etapas de la práctica, así como, en su futuro
desempeño laboral concreto. Téngase en cuenta que las prácticas de observación, son procesos
vitales en la formación (Fuertes Camacho, 2011), más todavía, cuando de formación técnica se
trata.
- La Práctica de consolidación, que implica la asunción progresiva de un rol laboral específico,
con acompañamiento de un experto. Esta práctica consolida los conocimientos ya
desarrollados a nivel áulico y fortalece progresivamente las habilidades, destrezas y valores
del futuro profesional en un contacto directo con las personas, situaciones y tareas reales.
En la medida que las habilidades, destrezas y valores se desarrollan, el nivel de
acampamiento del experto disminuye. Puede decirse entonces que, esta práctica se constituye
en el camino hacia la autonomía absoluta en el cumplimiento del rol profesional específicos.
Téngase en cuenta que, en las actividades educativas regulares, los estudiantes siguen
aprendiendo y consecuentemente, fortalecimiento sus conocimientos. De ahí que, que existe
un enriquecimiento mutuo entre la empresa y la institución educativa, dado que, los procesos
educativos responden a las necesidades e intereses del contexto laboral específico, a la vez
que, este aporta a las instituciones educativas haciéndoles conocer sus reales necesidades e
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incluso, colaborando con información valiosa en la medida que los estudiantes realizan sus
prácticas preprofesionales.
- Práctica laboral inicial, implica alta autonomía y mínima supervisión o más bien, supervisión
de acuerdo con los protocolos regulares a nivel empresarial, dado que, trascendiendo por el
aprendizaje, se centra en la prestación de los servicios en actividades laborales reales o la
producción en talleres, laboratorios u otras áreas específicas. Se está hablando entonces, del
cumplimiento de un rol profesional con autonomía y solvencia laboral en contextos reales.
Durante el desarrollo de toda la práctica, debe haber la coordinación suficiente entre
la institución educativa y la empresa. La primera, busca las mejores alternativas para realizar
una adecuada formación de los bachilleres técnicos dentro de un sistema de relaciones dadas
entre las instituciones educativas y las empresas, mientras que la segunda, orientada por el
mismo objetivo brinda las facilidades para las prácticas preprofesionales, así como también,
provee de la información necesaria, de tal manera que, la institución educativa ajuste o adecue
el currículo a las reales necesidades del entorno laboral.
Esta posibilidad configura la idea de la cooperación entre el sistema educativo y el
contexto laboral. Téngase en cuenta que, se proyecta un mutuo beneficio. Mientras en los
sistemas educativos se desarrollan las competencias sociales y laborales suficientes de acuerdo
con las exigencias contextuales, el sector laboral, tendrá la posibilidad de acoger colaboradores
competentes para la sostenibilidad y sustentabilidad de la empresa. Esto, tiene diversas
ventajas en el orden social y laboral, entre otras las siguientes:
- Educación contextualizada, que involucra el conocimiento del contexto inmediato social y
laboral, sin perder de vista los cambios y transformaciones que experimenta el mundo, lo cual,
impone exigencias cada vez más dinámicas.
- Colaboración educación empresa en los procesos formativos de profesionales competentes,
lo cual, reduce costos para los sistemas educativos en cuanto a la implementación de talleres,
adquisición de equipos y demás recursos que las empresas pueden poner a disposición de los
estudiantes en las prácticas preprofesionales.
- Optimización de las inversiones del estado en la adquisición de máquinas, equipos y demás
recursos específicos necesarios para la formación técnica específica de los bachilleres. Ciertas
máquinas y equipos podrían no adquirirse directamente para las instituciones educativas,
dado que se dispondrían a nivel empresarial para las prácticas preprofesionales.
- Integración de profesionales competentes al ámbito laboral, reduciendo costos en procesos
de inducción, capacitación y pruebas de colaboradores que no están debidamente preparados
o no conocen el contexto laboral. Nótese que la práctica preprofesional ha brindado de
información y conocimiento para que los colaboradores se integren conociendo la empresa, lo
cual supone una ventaja que no puede ser minimizada.
Sistema de Evaluación
El sistema de evaluación de la estrategia pedagógica para la enseñanza de las asignaturas
técnicas a nivel de bachillerato, involucra la implementación de un sólido sistema de
seguimiento en las distintas acciones estratégicas, a los resultados de aprendizaje, así como, a
la implementación de la misma. Por consiguiente, el profesorado tendrá en cuenta distintos
aspectos, entre los cuales están: ¿Qué evaluar? ¿Para qué evaluar? ¿Cómo evaluar? ¿Qué
decisiones deben tomarse?
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¿Qué evaluar?
Debe definirse con claridad el objeto de la evaluación, es decir, el profesorado debe saber si
está evaluando conocimientos, habilidades, destrezas o valores. Si bien, estos aspectos pueden
evaluarse de manera conjunta o integralmente, no es bueno cierto o qué, la claridad sobre cada
uno de los aspectos señalados permitirá plantear tipos de evaluación, recursos y demás
posibilidades necesarias para tener resultados objetivos y precisos.
¿Para qué evaluar?
Los objetivos de evaluación deben de estar claramente definidos, dado que se convierten en
las orientaciones fundamentales para la implementación de técnicas instrumentos y demás
posibilidades de evaluación. Por tanto, la evaluación se implementará, básicamente para lo
siguiente: identificación de necesidades e intereses de los estudiantes, identificación del nivel
de logros en términos de aprendizaje, valoración del nivel de aceptación de las acciones y
actividades estratégicas, identificación de aspectos que deben mejorarse, valoración de la
relación entre la institución educativa y la empresa, entre otros, dirigidos a la mejora continua
tanto del aprendizaje, así como también, de la implementación de la estrategia.
¿Cómo evaluar?
El profesorado y la institución identificarán los métodos, técnicas e instrumentos más
adecuados para la evaluación de acuerdo con los casos señalados en el párrafo anterior. Es
importante que, la evaluación se constituye en un proceso que aporta al desarrollo de
aprendizajes, más allá del registro de calificaciones o notas cómo se ha acostumbrado en la
educación tradicional. En este contexto, la evaluación implica un proceso de fortalecimiento
de los aprendizajes, así como también, un espacio profundo de reflexión y análisis sobre los
resultados y las alternativas de mejora a implementarse para garantizar el éxito educativo
individual y colectivo.
¿Qué decisiones deben tomarse?
Uno de los aspectos fundamentales de la evaluación es la toma de decisiones. En la educación
tradicional, tras los procesos de evaluación, generalmente, las decisiones han desembocado
en el registro de las calificaciones, lo cual, ha redundado única y exclusivamente en la
aprobación o reprobación de asignaturas o cursos. Desde la perspectiva de esta estrategia, las
decisiones pueden ser variadas, entre otras las siguientes: aplicación de nuevos procesos de
evaluación, implementación de mejoras en los procesos y actividades educativas,
retroalimentación oportuna o sobre la marcha, personalización del aprendizaje, entre otras.
Cómo se puede notar, el registro de calificaciones, si bien, puede ser un aspecto
importante con fines de promoción escolar, dado que, los sistemas educativos mantienen este
procedimiento; no es menos cierto que, la evaluación se constituye en uno de los principales
mecanismos para la mejora continua y el éxito educativo.
CONCLUSIONES
La evidencia sobre el uso de tecnologías digitales y sus beneficios a partir del desarrollo de
habilidades cognitivas en estudiantes en edad temprana ha sido mostrada en diversas
investigaciones. Afirman que el enriquecimiento de los ambientes educativos, a través de una
mayor exposición a las tecnologías de la comunicación e información, supone una mayor
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riqueza de estímulos que debería influir positivamente en el desarrollo de habilidades
intelectivas superiores en profesionales y, más concretamente, en las competencias cognitivas
básicas de comprensión lectora, cálculo y razonamiento lógico-matemático de los estudiantes.
En un estudio previo, se mostró que las competencias tecnológicas influyen muy
positivamente en diferentes áreas del aprendizaje. A partir de los resultados que arrojó su
estudio, se concluye que más que un elevado conocimiento sobre tecnología, saber trabajar
con ella eleva el rendimiento del estudiante.
Se explica que cuando el niño se enfrenta a la tarea de comprender un video, lo activa,
o sea, recuerda contenidos previos y los relaciona con el nuevo material; reutiliza
conocimientos vinculados a la utilización de lenguaje o imágenes que ya ha asimilado para
comprender la información que le proporciona el video, lo que se conoce como comprensión
lectora de otros soportes; selecciona y organiza la información que lee o escucha; así,
comprende la estructura y el sentido de un texto audiovisual. La comprensión de ese material,
abstracto y goloso de imágenes en movimiento y sonidos, constituye un reto complejo para el
niño ya que para entenderlo debe relacionar los contenidos del video con sus conocimientos
previos. Del mismo modo, se ha encontrado también en este escenario interacción entre el
elemento audiovisual y el lenguaje. El niño utiliza la información auditiva y visual para
obtener el mensaje que le proporciona el video.
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